sábado, 27 de octubre de 2007

Uno de los recientes

Mi corazón

Te ríes
-más por verguenza que por gracia-
de este corazón abierto y pornografico
que no pone censura a cuanto es,
revuelca en su arteria
y se detiene,

colapsa cuando mira ciertas puestas de sol.

Pero esta mañana le pones encima la cobija
- por amor más que por esconderlo-,
le besas callada
antes de irte
dejando en su frente el amanecer.